El Ministerio de Transportes estima reingresar dentro de diez días las bases de licitación del Transantiago a la Contraloría, plazo en el que la cartera realizará los ajustes al text, a sugerencia del organismo que detectó los errores.

Dos largas reuniones hubo la semana pasada entre representantes de ambas instancias, las que terminaron por concluir que la mejor alternativa era que el Gobierno sacara el documento para evitar su rechazo.

Sin embargo, autoridades de Transportes relativizaron el inconveniente asegurando que los problemas solo son de “forma y no de fondo”, por ejemplo en la redacción.

Así lo señaló el subsecretario de la cartera, José Luis Domínguez, quien señaló que el plazo autoimpuesto por el Ejecutivo para hacer los ajustes en las bases es de diez días para que sean reingresadas a la Contraloría.

Nuevo traspié en el proceso que hace años está pendiente. La licitación del sistema lo inició el exministro de Transportes, Andrés Gomez Lobo, el año 2015. Lo concretó su sucesora, Paola Tapia, con el ingreso del texto el 2017 a la Contraloría.

Dicho concurso no logró concretarse tras el cambio de Gobierno, ya que las actuales autoridades lo declararon desierto en marzo del año pasado, comprometiendo una nueva subasta.

Por eso, la exministra Tapia dijo lamentar el retraso en la licitación.

Entre las consecuencias de esta constante postergación en el proceso está que el Gobierno ha debido extender los contratos de varias operadoras del Transantiago, mientras en paralelo ha incorporado los buses ecológicos y menos contaminantes para renovar la flota que ya cumplió su vida útil.

El académico de la Universidad de Santiago especializado en transportes, Rodrigo Martin, dijo que los cambios solo han sido “parches”.

Las bases sacadas de Contraloría son aquellas que buscan adjudicar a la o las empresas propietarias de los buses, que serán distintas de las que estarán encargadas de operarlos, cuyo texto está en revisión en la Dirección de Presupuesto del Ministerio de Hacienda.