El Alcalde de Santiago, Felipe Alessandri y el Rector de la Universidad Tecnológica Metropolitana, Luis Pinto, firmaron un acuerdo de colaboración que sigue los Objetivos de Desarrollo Sustentable de la ONU de trabajar en investigaciones aplicándolas en pro de las ciudades y los efectos que el cambio climático pueda tener en ellas.

El acuerdo es producto del trabajo que realizan las investigadoras de esta casa de estudios, Rosa Chandia y Daniela Godoy, quienes en 2018 iniciaron el proyecto FIC-R del Gobierno Regional Metropolitano de Santiago, “Aguas de Barrio”, el que tiene por objetivo explorar la posibilidad de implementar un modelo participativo para la recuperación de aguas lluvias.

El Rector Luis Pinto recalcó “debemos ser capaces de replicar iniciativas como esta y como muchas otras, que nos ayuden a cambiar el “rumbo de colisión”, en el que está sumido el mundo. Es por ello que La UTEM, con sus sellos de sustentabilidad, tecnología y responsabilidad social, no busca únicamente generar conocimiento avanzado y formar profesionales, sino aportar en la solución de los problemas públicos que aquejan a nuestra Región y a nuestro país.

Aguas de Barrio

La forma de trabajo es a través de sistemas de drenaje sustentable en el paisaje urbano del centro sur de Santiago, específicamente la zona del Barrio Almagro, cuyos vecinos son los principales actores en el diagnóstico y evaluación de las posibilidades de intervención.

El equipo Aguas de Barrio, aporta con la información técnica y busca la mediación con la Ilustre Municipalidad de Santiago, responsable de las intervenciones en el espacio público donde se ejecuta.

El proyecto ha pasado por diversas instancias participativas con los vecinos del barrio y con los equipos técnicos de la Municipalidad, entre estas se han realizado campañas de difusión, Jornadas de Capacitación y Talleres de Co-ideación y Validación con el fin de llegar a consensos para la detección de los mejores puntos y áreas de posible intervención, para así dar respuesta a las necesidades que tienen los habitantes, permitiendo aprovechar las debilidades urbanas y oportunidades medio ambientales que entrega el barrio en el ámbito sustentable.

A partir de lo propuesto por los vecinos, se realizó un análisis de la información con el equipo de Aguas de Barrio, para posteriormente, realizar una convocatoria que permitió socializar el proyecto y en base a los consensos acordados en los talleres, también convocar a entidades públicas y actores relevantes.

Luego de todas estas reuniones y estudios se consensuaron cinco lugares en los que se establecieron los atributos y características que constituirán las bases del trabajo colaborativo que en esta etapa reúne a estudiantes de arquitectura y arquitectos en el Seminario Internacional y Workshop “Agua en la Ciudad. Estrategias de Diseño participativo”.