La Dirección de Educación Municipal (DEM) de Santiago envió un mensaje público a los apoderados del Instituto Nacional advirtiendo que “se han perdido miles de horas de clases”, esto en medio de la toma votada por los estudiantes.

Junto con eso señaló que “nos acercamos al término de semestre y muchos no están logrando los requisitos mínimos para ser promovidos de curso”, según consignó El Mercurio.

El riesgo de perder el año es muy alto. No estamos hablando de procesos de Aula Segura, ni siquiera del desalojo, sino de perder el año escolar”, advirtió la intendenta Karla Rubilar.

En esa línea, tras reunirse con el alcalde Felipe Alessandri y la defensora de la niñez, el rector Fernando Soto señaló que dada la contingencia “amerita una revisión” del cumplimiento del calendario académico.

Soto también se dirigió a los apoderados a través de una carta pública, en la que “la prolongada inasistencia a clases tendrá consecuencias negativas en los cursos superiores, afectando el normal proceso de avance de los aprendizajes en cada una de las etapas de la vida estudiantil de su(s) hijo(s)”, llamando a velar por cumplir con la asistencia y justificar debidamente en caso de licencias u otras complicaciones.

Dentro de las medidas tomadas en años anteriores para no perder el año se encuentra adelantar las vacaciones de invierno, como pasó en 2015 con la extensión del paro de profesores, como también extender el calendario hasta enero. Asimismo, se barajaron alternativas como extender las jornadas de clases.

Esta posibilidad es apoyada por la DEM, desde donde su directora señaló que “si hay que estar todo enero en clases, se va a hacer”.

Los estudiantes del Instituto Nacional definirán esta tarde si continúan o extienden la toma, pese a que el alcalde advirtió que procedería a desalojar el establecimiento.