Un particular nacimiento se llevó a cabo en el hospital San Borja Arriarán, donde se realizó una cesárea a una joven de 19 años con 32 semanas de gestación.

De acuerdo a lo explicado por el jefe del Servicio de la Mujer y Recién Nacido, Jaime Sáez, a LUN, las dos primeras ecografías de la paciente las realizó en otro centro asistencial.

En una tercera, realizada la semana 29, advirtieron que el bebé no se estaba gestando en el útero, por tanto, pensaron que se trataba de un “embarazo abdominal”.

Una segunda eco, ahora vaginal, confirmaba que el embarazo se encontraba fuera del útero, cubierto por una capa muy delgada.

Ante esto, decidieron esperar hasta la semana 32 para practicar una cesárea, la que sería de alto riesgo tanto para el bebé como para la madre.

“Esperamos hasta ese momento pensando en el peso fetal, la maduración fetal, que tuviera el mínimo riesgo de impacto neurológico y sabiendo que este embarazo, que prácticamente no tenía paredes, se podía reventar en cualquier momento y podíamos perder la guagua y eventualmente a la mamá”, explicó.

Tras realizar el tajo, sostuvo, “lo primero que nos encontramos fue el útero vacío que veíamos en la ecografía. Era de tamaño normal, pero al otro lado había una gran masa, que involucraba a la guagua y resultó ser un útero unicorne comunicante“.

El médico explicó que esto se da “cuando un lado del útero se desarrolla bien y la otra parte es un rudimento, pero están ligeramente comunicados”.

“Lamentablemente para esta mujer su embarazo se gestó ahí, donde habitualmente no se gestan porque es una cavidad atrófica, chica, que no se distienda. Tenía una capita muy delgada, traslúcida”, detalló.

Lo habitual en casos como estos, dijo Sáez, es que se produzcan abortos espontáneos y precozmente, porque “son úteros que no tienen capacidad de distenderse, no tienen la capacidad de anidar”.

Finalmente, con 1 kilo y 130 gramos, nació Maximiliano, quien llegó a los 2 kilos en incubadora.

Este útero atrófico en tanto fue extirpado, y la paciente, si desea, podría volver a embarazarse.