Un cambio en su rutina diaria tendrá que hacer el presidente del directorio de Metro de Santiago, Louis de Grange, luego que el martes el grupo ecoterrorista “Individualistas Tendiendo a lo Salvaje” (ITS) enviara un artefacto explosivo a su casa, en la comuna de Las Condes, en la región Metropolitana.
La explosión fue frustrada gracias a los protocolos de seguridad de la empresa estatal.
El ingeniero civil sistemáticamente utilizaba el mismo Metro para trasladarse desde su casa, en el sector oriente, hasta las oficinas de la empresa, a la altura del metro Moneda.
Viajes que ahora deberá repensar, puesto que el Gobierno catalogó de terrorista el ataque y la justicia instruyó otorgarle protección especial.
Tal como ocurrió en enero de 2017 con el entonces presidente del directorio de Codelco, Óscar Landerretche, cuando detonó un regalo bomba que los mismos ecoterroristas le habían enviado. Ahora De Grange tendrá que trasladarse en auto, siempre bajo la atenta mirada de los funcionarios de Carabineros pertenecientes al Departamento de Protección de Personas Importantes (DPPI).
La razón es clara: los autores del ataque aseguraron en un comunicado Web que analizaron los hábitos del ejecutivo e incluso, señalaron que podría haber sido más directo el ataque. No obstante, prefirieron el mecanismo de paquete-bomba o regalo-bomba para De Grange.
Ecoterrorismo
El objetivo del grupo, que apareció en la escena pública el 13 de enero de 2017, tenía como objetivo la venganza contra Metro por la construcción bajo tierra de las nuevas y futuras líneas del transporte metropolitano. A su juicio, pretenden salvar el planeta del daño que el hombre le está causando.
Sin embargo, a la fecha no se han producido ataques similares a empresarios en Chile. Es decir, no existe registro público que algunos de los grupos económicos de nuestro país hayan sido amenazados por parte de los ecoterroristas.
Al contrario: hasta ahora es Codelco y desde el martes, Metro, las dos compañías que sus principales representantes han sido blanco de ataques.
Por eso, el ministro del Interior, Andrés Chadwick, reconoció en La Moneda que se han levantado las alertas necesarias para los representantes de las empresas públicas, como ENAP, EFE, TVN, BancoEstado, Asmar, Polla Chilena de Beneficencia, entre otras.
Así, éstas deberán asumir protocolos ante los hechos y amenazas de los que no hay detenidos.
Alerta por Mauricio Morales
Pese a las críticas a la inteligencia chilena, incluida la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI), ésta se encuentra analizando datos. Ello pues el próximo 22 de mayo se cumplen 10 años desde que Mauricio Morales Duarte murió en Santiago, cuando trasladaba una bomba para ser colocada en la Escuela de Gendarmería.
El paso de una década que podría abrir espacio para que agrupaciones antisistema puedan recordar a Morales, colocando bombas en algunas zonas de la capital.
Sin ir más lejos, el comunicado de ITS (que podía tener colaboración argentina) menciona al fallecido anarquista.
Por ende, no es descartable que la bolsa con dos extintores que mantenían pólvora y un detonador, pudieran estar relacionados con aquel 22 de mayo.
