Las autoridades metropolitanas realizaron un balance tras la primera marcha estudiantil de este año que se realizó por las calles del centro de Santiago la mañana de este jueves.
Desde Carabineros cifraron que siete mil personas participaron en la marcha, además señalaron que desde un principio de la manifestación comenzaron a haber incidentes.
“Desde un principio se comenzaron a generar algunos desórdenes. Cuando comenzaron los daños a la propiedad pública y privada, Carabineros tuvo que ir interviniendo en diferentes fases de la marcha”, señaló el general Mauricio Rodríguez, jefe de la Zona Metropolitana.
Tras esto, dio a conocer que 35 personas fueron detenidas -entre ellos seis menores de edad- por los incidentes que se registraron a lo largo de la marcha. En tanto, seis uniformados resultaron con lesiones leves, uno de ellos se encuentra en observación en el Hospital de Carabineros tras ser atacado por una turba cuando realizaba labores de control de tránsito.
Por su parte la intendenta Metropolitana, Karla Rubilar, comentó que “es una de las pocas marchas que no ha logrado terminar efectivamente con el evento final en el escenario de Echaurren. Eso fue porque lamentablemente en muchos puntos del trayecto tuvimos varios desórdenes”.
Esto porque la movilización terminó de forma abrupta luego que encapuchados prendieran fuego al escenario donde se realizaría el acto de cierre.
La máxima autoridad regional además condenó los hechos de violencia y aseguró que “los que solicitaron autorización se vieron completamente sobrepasados de controlar esta marcha. Carabineros solamente actuó cuando se vio atacado el orden público, la seguridad, inmobiliario público y propiedad privada”.
Además llamó a una evaluación de los convocantes y organizadores para saber qué paso y por qué la marcha no pudo ser terminada. “Los organizadores de hoy quedaron claramente al debe”, comentó.
Por su parte, la presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile y una de las voceras de la Confech, planteó que los encapuchados estaban organizados para poner fin a la movilización de forma abrupta.
