A un año exacto de que el Gobierno declarara desierta la licitación del Transantiago (ahora bautizado como Red) que desarrollaba la administración anterior, la ministra de Transportes, Gloria Hutt, admitió retraso en el ingreso de las nuevas bases a la Contraloría.

Solo ocho días llevaba en el cargo la secretaria de Estado en aquel momento. A la hora de dar a conocer la decisión del Ejecutivo, acusó improvisación en el frustrado proceso y que los incentivos eran incorrrectos.

Recordar que ese concurso sufrió varios inconvenientes: las bases inicialmente fueron rechazadas por la Contraloría y una vez que ingresaron, el proceso fue paralizado por el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia acogiendo la denuncia de un par de empresas que acusaron barreras de entrada.

A doce meses de aquello, Gloria Hutt reconoció retraso en el ingreso de las bases a la Contraloría respecto de los plazos autoimpuestos por el Ejecutivo. La razón es que habían detalles que debían perfeccionarse.

Para que la decisión de declarar desierto el proceso no impactará en la entrega del servicio, el actual Gobierno debió extender el contrato de RedBus y STP, dos de las operadoras del sistema.

El Ejecutivo confía en que ese tipo de acuerdos no serán replicados con los futuros contratos por caducar y que el proceso de renovación de flota se desarrollará dentro del período establecido para evitar que más buses sigan cumpliendo la vida útil.

Quien encabezó el frustrado proceso anterior, la exministra de Transportes, Paola Tapia, advirtió que extender los contratos podrían encarecer el sistema e impactar en las tarifas para los usuarios.

El investigador y especialista en transportes del Instituto Libertad y Desarrollo, Rodrigo Troncoso, destacó como una buena propuesta la idea del Gobierno de separar a la empresa propietaria de los buses con aquellas que los operen, ya que permitirá flexibilizar el sistema.

Pese al “desfase de dos o tres meses” que admitió la ministra Gloria Hutt, la idea del Gobierno es adjudicar la primera parte de las bases a mediados de este año.

Según Transportes, el texto fue enviado a fines de enero a Hacienda que estaría revisando los alcances financieros del concurso y los cambios que se proponen para el ahora denominado Red.