La Policía de Investigaciones se encuentra indagando la muerte de una joven de 20 años que se registró la noche del lunes al interior de Acuario, una clínica estética que está ubicada en Providencia. La víctima fue identificada como Tahía Cea quien se sometió a una abdominoplastía y según información preliminar, habría fallecido por un paro cardíaco.

Cea, madre de dos hijos, llegó la tarde del lunes a esta clínica para someterse a una operación. De acuerdo a información preliminar, la cirugía no tuvo mayores inconvenientes, pero en el postoperatorio en la sala de recuperación, la paciente entró en paro cardiorespiratorio y falleció pese a los esfuerzos de reanimación.

Dentro de los trabajos que ha debido realizar la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones se encuentran las pericias al cuerpo y la toma de declaraciones al equipo médico que estuvo a cargo de la operación. Además en este caso será clave el informe forense que emitirá el Servicio Médico Legal para establecer la causa de deceso.

El subcomisario, Giancarlo Ramazoni conversó sobre las diligencias realizadas y señaló que la clínica no tenía sala de Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).

“Cuentan con un equipo de trabajo bastante completo. Nosotros no nos podemos pronunciar en el tema de la negligencia, tenemos que esperar la causa de muerte del Servicio Médico Legal, además de las pericias que realizamos en el lugar. Por lo que señaló el médico no contaban con UCI”, explicó.

Además, la seremi de Salud de la región Metropolitana, Rosa Oyarce, revisó en terreno las condiciones en las cuales funcionaba esta clínica. Debido a varias falencias que fueron detectadas, el organismo determinó prohibir su funcionamiento.

Dentro de los problemas encontrados se detectó había falta de ventilación en el pabellón, falta de un equipo de reanimación y tampoco tenía el registro actualizado de las cirugías.

Sin embargo, Oyarce explicó que generalmente a las clínicas se les autoriza a funcionar sin una sala UCI, siempre que tengan alguna clínica de mayor especialización que las respalde, situación que sí tenían.

Sanciones anteriores

Además, la clínica ya había sido condenada en 2017 por un caso de negligencia médica, luego que una paciente presentara problemas en el post operatorio.

En tanto, la paciente Verónica Zabala estaba a la espera de someterse a una nueva cirugía para reparar una intervención estética que resultó fallida. Sin embargo, explicó que iniciará acciones legales porque “podría haber sido yo”.

Tras la situación que se registró, los cercanos a la víctima manifestaron su rabia e impotencia rompiendo todo a su paso al interior de la clínica.