Tras dos años en remodelación, este reciente fin de semana se reabrió el Jardín Japonés del Parque Metropolitano (ParqueMet) de Santiago. El espacio -que fue ampliado- cuenta con caídas de agua, ríos, lagunas y una gran vista a la capital vinculada a la cultura nipona.

El jardín fue inaugurado para el público durante el sábado 12 de enero. Sin embargo, acusan que el mismo fin de semana sufrió daños por la presencia de las personas en lugares que no estaban habilitados para ser utilizados.

Juan Manuel Gálvez, arquitecto que participó en el proyecto y experto en jardines japoneses, explicó lo que significa para la cultura de Japón este tipo de espacios. “No hay tacto, es una cosa visual. Es una cosa de contemplación y de observar el espacio sagrado”.

En contraste, señaló que “nosotros los latinoamericanos, somos más intrusivos (…) Tenemos una cosa con el tacto mucho más fuerte y vivimos el espacio público a través del tacto”.

Daños provocados

“Tenía súper claro que hacer un jardín japonés en Chile iba a pasar esto (…) Van a disfrutar el jardín de manera chilena, que es a través del tocar. Fue un tema para mí complejo (…) Fue un desafío chilenizar un jardín japonés”, explicó.

Tras esto, Gálvez enumeró que varias personas ingresaron a la laguna, rodaron por el pasto, lo pisaron y pasaron por arriba de varias plantas. Ante esta situación, explicó que los jardines japoneses son para “disfrutar el silencio y contemplar la naturaleza”. Sin embargo, reconoció que “ss una cosa básica de respeto (…) La gente disfrutó plásticamente el jardín japonés”.

“Encuentro que para mí que el jardín japonés es un espacio cultural, de educación (…). Si yo voy a entrar, me tengo que comportar (…) Lo que vi es que la gente no respeta esa vocación del lugar”, lamentó.

Además, relató una experiencia que tuvo con uno de los jardineros encargados del lugar. “Quiero que la gente se vaya, nunca debieron haber abierto el jardín japonés”, le habría señalado el funcionario.