Las policías y el Ministerio Público trabajan para dar con los responsables de la detonación ocurrida el viernes pasado en un paradero del Transantiago, que dejó a cinco personas lesionadas. Sin embargo, dada la experiencia, puede que se convierta en un caso más sin detenidos.

Lo anterior, considerando por ejemplo que dos bombazos anteriores, de alta connotación pública, como el que afectó Sergio Lanskron en Barrio Yungay en 2014; y a Óscar Landerretche en su domicilio en 2017, continúan sin responsables.

En esa línea, según consignó El Mercurio, en los últimos seis años solo se han logrado cinco condenas: Luciano Pitronello (2012), Hans Niemeyer (2013), Carla Verdugo e Iván Silva (2013), Juan Flores, Joaquín García y Kevin Garrido, todos condenados en 2018.

Tras la detonación del viernes, en los días siguientes el GOPE ha debido trabajar en distintos operativos por llamados alertando objetos sospechosos.

Entre las dificultades para dar con los autores de este tipo de ataques, quienes estuvieron a cargo del Ministerio del Interior coinciden que el sistema de inteligencia quedó obsoleto.

El fiscal Manuel Guerra señaló que “se trata de personas que actúan compartidamente, trabajan a nivel celular, por decirlo de algún modo”. Asimismo, indicó que en estas indagaciones el “pinchar” teléfonos no da muchas pistas y se mostró favorable a otras alternativas, como crear un registro de control de explosivos y de instrumentos para generarlos.