La Corte de Apelaciones de Santiago confirmó la sentencia que condenó a un bar nocturno ubicado en Bellas Artes. La demanda se efectuó ya que sus guardias discriminaron a una clienta transgénero dejándola fuera del recinto.
Estos actos excluyentes culparon en primera instancia al recinto propiedad de la Comercializadora y Administradora Santa Lucía S.A al pago de una multa de 20 UTM, además de dictar que los trabajadores del bar debían realizar una capacitación la sobre la población transgénero.
Sin embargo luego de una apelación debido a que el local tiene nuevos propietarios, se rebajó la multa aplicada a 10 UTM y se suspendió la capacitación a funcionarios.
En cuanto a los hechos ocurridos en febrero de 2016, se relató que la demandante concurrió al bar “El Túnel” donde el guardia del recinto le pidió su cédula de identidad, a pesar de que esto no es lo común en ese bar.
Acto seguido, el guardia le niega la entrada repentinamente, y levanta la voz para decirle, “no puedes ingresar al local por estar vestido de mujer”.
Los otros clientes del local podían percibir la falta de respeto que se le estaba haciendo, pero no intervinieron. Posteriormente, la demandante reaccionó a lo que el guardia respondió, “¿a cuál baño entrarás? ¿Al de mujer o al de hombre?”
Niki Raveau, Presidenta de PETRA (Observatorio Pensamiento Trans) y Vicepresidenta de Fundación Transitar calificó que este acto era “una especie de política del local el discriminar a personas trans” por lo cual fue condenado.
