La Corte Suprema acogió un recurso de revisión y decretó la absolución de un hombre que fue condenado como autor del delito de hurto frustrado en la comuna de Providencia, región Metropolitana.

La determinación se tomó tras un fallo unánime del máximo tribunal debido a que este hombre sufrió una suplantación de identidad por parte de su hermano.

Marcelo Barahona González ingresó el 4 de agosto de 2006 a una tienda Paris ubicada en la comuna de Providencia. En ella, sustrajo un buzo avaluado en $39.990, pero fue sorprendido y detenido. Al momento de ser arresto se hizo pasar por Marco Barahona González, su hermano.

Tras las indagaciones correspondientes, fue condenado -bajo el nombre de Marco- ese mismo año a 41 días de prisión en su grado máximo.

Sin embargo, cuando Gendarmería recibió las copias de la sentencia dictada, le señalaron al tribunal que “era imposible que el recurrente hubiese cometido el delito”, ya que estaba privado de libertad en el CDP San Miguel desde el 5 de diciembre de 2004 al 6 de diciembre de 2009.

Producto de esto, en mayo de 2012, Marcelo Barahona González fue condenado por delito de usurpación de identidad tras aprovechar su parecido físico y edad similar.