Fiscalía se encuentra investigando la presunta responsabilidad que tendría tanto la aerolínea Latam como los padres de la niña de 14 años que en agosto murió al interior del avión en que viajaba desde Miami a Santiago.

Se trata de una niña que había viajado junto a su familia para asistir a un congreso cristiano de la Iglesia Pastor Marcos Barrientos, para luego ir a Disney junto a sus tres hermanos, según consignó La Tercera.

En este caso se investiga la responsabilidad que pudo haber tenido Latam por actuar de forma negligente ante los dolores presentados por la menor, y también la de los padres por haber viajado sin la dosis necesaria de medicamentos, ya que la niña sufría de hipertiroidismo, por lo que debía tomar Thyrozol y Propanolol.

Medicamentos

De acuerdo al relato de la madre, le preguntaron al médico de P.Z.S si podrían viajar a Estados Unidos sin problemas, considerando su hipertiroidismo; a lo que el facultativo le habría respondido que no había problema.

Tras obtener la receta médica, agregó el padre, le compraron los remedios a la menor.

Ya en Estados Unidos la niña no manifestó problemas de salud. Sin embargo, dos días previos al vuelo de retorno se acabó el Propanolol.

El padre declaró no tener claridad del porqué ocurrió esto, ya que según dijo, viajaron con las dosis necesaria para todos los días fuera de Chile.

Una teoría es que algunas se hayan caído o que la niña haya tomado dosis adicionales.

Atención en vuelo

En su declaración ante el Ministerio Público, los padres de la niña relataron que pidieron a las azafatas los medicamentos que les faltaban cuando la menor comenzó a sentir dolores; lo que fue negado por la aerolínea por no contar con autorización médica.

A la falta de medicamentos, le dieron dos aguas de manzanilla.

Al continuar los dolores, el padre, ya más desesperado, pide a la tripulación que despierten a un doctor para que autorizara la medicación, obteniendo finalmente la pastilla.

Pero los dolores siguieron. La madre la llevó al baño, donde la niña vomitó y comenzó a golpearse contra la pared.

De acuerdo al relato, pese a pedir ayuda a las azafatas, ellas habrían repartido comida a los pasajeros.

De acuerdo al relato, sólo cuando faltaba una hora para aterrizar llamaron a un médico y comenzaron a asistirla en la parte posterior del avión, momento en que avisaron a los pasajeros que aterrizarían de emergencia.

Para esclarecer las responsabilidades en la muerte, Fiscalía pidió a la aerolínea información respecto a las cualidades técnicas del avión, listado de los pasajeros y altitud, presión, trayecto y punto de no retorno; además la posibilidad de aterrizar en otro aeropuerto.

Además, deberán declarar las azafatas, el capitán del vuelo y el médico tratante de la niña.