Con el voto favorable de los 124 parlamentarios que estaban en la sala, la Cámara de Diputados aprobó el proyecto que retrasa en un año, la implementación del sistema de admisión escolar en la región Metropolitana, respecto del calendario que fija la Ley de Inclusión.

Durante su intervención, el diputado de la Democracia Cristiana, Mario Venegas, sostuvo que este aplazamiento no afecta en nada el sentido de la legislación.

El ministro de Educación, Gerardo Varela, agradeció el apoyo transversal que tuvo la iniciativa, descartando que se trate de un trinfo político suyo. Además, negó que la postergación se deba a problemas con el sistema de admisión, el cual valora altamente.

La principal razón esgrimida por los técnicos de la Universidad de Chile, para retrasar en un año el sistema en la región Metropolitana, es el tamaño de la ciudad de Santiago, más que el número de escolares que concentra.

En la oposición, en tanto, consideran que la postergación de la mal llamada tómbola, también debiera hacerse extensiva a la región de Valparaíso y el Bío Bío, como sostuvieron los autores de la moción que busca ese propósito, el diputado de Renovación Nacional, Luis Pardo y su par de la UDI, María José Hoffmann.

La diputada comunista Camila Vallejo cuestionó la iniciativa impulsada por estos parlamentarios oficialistas, y sacó a colación una columna escrita por Sylvia Eyzaguirre, del Centro de Estudios Públicos, donde sostiene que no hay asidero alguno que justifique el proyecto de la derecha.

Tras la aprobación, el proyecto quedó listo para ser promulgado por el Gobierno, de forma que el nuevo sistema de admisión comenzará a regir este año para los padres y apoderados de las regiones de Arica y Parinacota, Antofagasta, Atacama, Valparaíso, Maule, Biobío, Araucanía, Los Ríos y Aysén, que se suman a Tarapacá, Coquimbo, O’Higgins, Los Lagos y Magallanes.