Este sábado 3 de febrero se realizará en la capital una fecha de la Fórmula E, competencia mundial de automovilismo cuya particularidad se basa en que los vehículos participantes son eléctricos.

El evento fue anunciado el año pasado y cuenta con un fuerte apoyo del Gobierno, que a través del intendente Claudio Orrego ha defendido la realización de esta carrera, apostando por la difusión de Santiago en alrededor de 200 países y por la promoción de la electromovilidad.

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El alcalde de Santiago, Felipe Alessandri, fue uno de los que en un principio también se mostró muy contento por la visita de la Fórmula E. En la presentación oficial de la competencia, en octubre pasado, indicó que “nosotros estamos felices de recibir un evento de esta categoría en Santiago, nos pone al nivel de grandes capitales del mundo”.

“Desde el primer día, cuando Enel y la Fórmula E nos contacta, pusimos la ciudad a la disposición. Es un evento para la ciudad, para nuestros vecinos, que por cierto lo reciben con los brazos abiertos”, agregó en su declaración a la prensa.

Sin embargo, su entusiasmo se fue menguando mientras comenzaba a emerger la molestia de los vecinos del Parque Forestal ante la realización de la competencia, esto por la intervención que supondría la realización de la carrera, que incluía asfaltar temporalmente calle Purísima ocultando sus tradicionales adoquines.

En diciembre pasado, surgieron las voces de quienes viven en dicho sector anunciando acciones legales por los posibles daños patrimoniales que la competencia podría generar en el lugar.

Fue el 2 de enero cuando el alcalde Alessandri moderó sus dichos. Del “pusimos la ciudad a la disposición” inicial pasó a declarar que el trazado había sido impuesto al municipio por el Gobierno y por la organización del certamen.

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“Nunca fuimos consultados por las condiciones en las que se haría esta carrera, ni menos la locación. El trazado y el recorrido fueron definidos en un contrato firmado entre la intendencia, el Ministerio de Energía, el Ministerio del Deporte y la organización en junio de esta año, e impuesto al municipio”, dijo a La Segunda.

Con el correr de los días, las diferencias se profundizaron. Esto llevó a que incluso el municipio se enfrascara en una discusión pública con el intendente Orrego en redes sociales. Mientras la autoridad regional revisaba obras en el Parque Forestal el viernes 19 de enero, la municipalidad tuiteó que dichos trabajos se realizaban sin su permiso.

La réplica no se dejo esperar. Orrego indicó por la misma red social Twitter que las obras ya estaban autorizadas.

Desde la municipalidad señalaron que efectivamente hubo una carta fechada en junio del año pasado donde Alessandri da el patrocinio de la comuna, pero que recién en noviembre se enteraron de las intervenciones que debían realizarse.

La último episodio de estas desavenencias se dio el 30 de enero, cuando el jefe comunal declaró a El Mercurio que incluso podría rechazarse la autorización para realizar la carrera de no cumplirse todas las exigencias solicitadas.

“Vamos a reservarnos (la atribución) de no autorizar la carrera, finalmente, hasta que se cumplan todas las exigencias que estamos haciendo“, aseveró.

Consultada por BioBioChile, desde la municipalidad indicaron que no existe un cambio de opinión por parte de Alessandri, sino que sólo se trata de la preocupación para que lo que se realice en la comuna a causa de la Fórmula E no pase por encima de la ley.