Los trabajadores del Hospital del Salvador en Providencia se declararon en alerta y acusan a la empresa que construye el nuevo recinto de buscar excusas para dejar inconclusas las obras, junto con buscar indemnizaciones por parte del Estado.

Lo anterior, luego de que la empresa mexicana GIA, dueña de casi la totalidad del consorcio de Salud Santiago Oriente, que se adjudicó la licitación del proyecto, enviara una carta al Ministerio de Obras Públicas.

El documento planteó la posibilidad de devolver la concesión e iniciar acciones legales en contra del Estado por no resolver las trabas de origen estatal que supuestamente han tenido desde hace más de tres años.

Para los trabajadores del recinto hospitalario lo anterior significa que la empresa dejaría inconclusas las obras. Por su parte, Karen Palma, presidenta de la multigremial, aseguró que se encuentran en alerta para reactivar el movimiento que inició en 2014, y que en caso de no haber una solución para el problema se realizará una paralización.

En ese sentido, la diputada Karol Cariola (PC) apoyó a los trabajadores y estimó que en este caso se refleja que para las empresas las concesiones hospitalarias son una forma de obtener dinero a costa del Estado.

En la carta enviada al Ministerio de Obras Públicas, la empresa acusa animadversión en contra del proyecto proveniente de diversos estamentos del Estado, cambios a la normativa aplicados retroactivamente a la concesión y entrega tardía de terrenos al enfrentar un plan interminable de prospección para llevar el caso a la justicia e iniciar acciones legales.