Tal como ocurrió en el mundo de los taxistas ante la irrupción de Uber, el sector hotelero mira con preocupación el sostenido crecimiento de la aplicación Airbnb, que permite a cualquier persona ofrecer alojamiento a través de internet.

Según publicó La Tercera, la plataforma ya tiene 11.300 alojamientos inscritos en la región Metropolitana (29 mil en todo el país). El gremio hotelero, en tanto, aseguró que tienen 18.959 habitaciones disponibles en la capital. Esto quiere decir que Airbnb concentra un tercio de la oferta para alojarse en la zona más habitada de Chile.

Desde la Federación de Empresa de Turismo (Fedetur), miran con preocupación estas cifras, sobre todo por la informalidad y el pago de impuestos, con un impacto negativo que, dicen, llega a los $11 mil millones.

Debido a esto, Andrea Wolleter, vicepresidenta ejecutiva de Fedetur, declaró al citado medio que no están en contra de Airbnb, pero piden su regularización, parecido a lo que sucede con Uber. “Queremos regularizar la oferta, traerla al mercado, porque nos preocupa la calidad del servicio al turista”, declaró.

Por su parte, desde el Servicio de Impuestos Internos (SII) señalaron que les preocupa la tributación de este tipo de plataformas. “Lo que se hace actualmente es verificar páginas web donde se ofrecen los arriendos de bienes raíces y generar visitas puntuales a efectos de corroborar la correcta tributación del arrendador de la propiedad, tanto en el IVA como en el impuesto a la renta”, consignó La Tercera.

Victoria Bramati, secretaria de prensa de Airbnb, indicó que ya han firmado 10 convenios con gobiernos de la región en materia de impuestos y que están abiertos a lograr algo similar en Chile.

Desde el gobierno, la subsecretaria de Turismo, Javiera Montes, valoró la incorporación de tecnología, pero llamó a quienes ofrezcan alojamiento a inscribirse en los registros del Sernatur y cumplir con los requisitos que establece la normativa.

Actualmente, Airbnb tiene 21 mil anfitriones en Chile y, durante 2016, alojaron a 215 mil huéspedes.