Para nadie es un misterio que el número de personas que decidieron incorporar la bicicleta a su cotidianeidad va en alza constante. Sólo en Santiago se registran más de un millón de viajes diarios, correspondientes al 7% de los traslados total, según datos de la Intendencia Metropolitana.

Esta realidad ha incentivado a las autoridades a buscar todo tipo de facilidades, considerando que la Región Metropolitana no cuenta con la infraestructura adecuada para el uso de la bicicleta.

En este contexto, se está implementando un plan piloto de un mes, que pone a prueba la capacidad y viabilidad de que los buses del Trasantiago porten bicicletas en su parte frontal, aliviando la carga de los ciclistas.

La iniciativa fue valorada por el vocero del colectivo Muévete, Tomás Echiburú, quien en conversación con BioBioChile reconoce que “estamos bien expectante a los resultados de este estudio, porque responde a una necesidad real en la ciudad”.

“Las autoridades se han dado cuenta que el uso de la bicicleta ha aumentado, pese a la baja inversión que se ha hecho. Yo celebro que se esté tomando en serio el tema, porque es una agenda que se ha instalado desde las organizaciones sociales”, añade.

En todo caso, el arquitecto de profesión y concejal de Providencia opta por la mesura, pues prefiere esperar los resultados del piloto antes de sacar conclusiones: “Me parece muy bueno que se hagan pruebas, básicamente para hacer lo que hacen las pruebas, evaluar qué tan bueno, qué tan viable y qué tan aplicable es la idea a la realidad local”.

Para dar un salto cuantitativo y cualitativo respecto al uso de la bicicleta, hay que integrarla con otros tipos de transporte. Y si este es el mejor mecanismo o el más viable, habrá que verlo. ¿En qué tipo de recorridos se podrá implementar? Tengo la sensación que podría funcionar más como acercamiento a la ciudad o en recorridos más periféricos”, complementa.

Críticas

Si bien sólo se está aplicando un piloto del proyecto impulsado por estudiantes de la Universidad Católica, la medida ha recibido varias críticas, teniendo en cuenta otras deficiencias que presenta el sistema de transporte en la capital.

Al respecto Echiburú afirma que “lo peor que uno puede hacer es cerrarse a este tipo de iniciativas en base a prejuicios, sino que justamente estos pilotos son para estudiarlos y tomar decisiones”.

Sobre lo mismo, reconoce que Transantiago tiene otras urgencias, sin embargo, “no deja de ser interesante que se aborde el tema de la intermovilidad, porque se puede integrar al Metro y ser parte de la solución”.

“Son medidas que van en esa dirección y me parece positivo. Yo espero que pronto podamos subir la bicicleta al Metro en algunos horarios o los fines de semana. Se han hecho pruebas y es factible, ¿por qué no puede ser factible esta idea?”, sentenció.