Tras conocer la resolución de la Corte Suprema que determinó la expulsión del país del sacerdote Jhon O’Reilly, condenando por abusos sexuales contra una menor, la fiscal que sustanció la causa en su contra, Carmen Gloria Guevara, valoró la determinación del máximo tribunal.
La acusadora en 2014 -junto a la fiscal oriente, Lorena Parra- llevaron a juicio oral al sacerdote de la Orden de los Legionarios de Cristo, atribuyéndole los delitos de abusos sexuales hacia dos alumnas del colegio Cumbres de Las Condes.
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El Tercer Tribunal Oral en Lo Penal de Santiago dio por acreditado el ilícito sólo en relación a una de las estudiantes, por lo que fue sentenciado a cuatro años de libertad vigilada.
A más de dos años del fallo, la fiscal Guevara calificó de “excelente” la suma de determinaciones adoptadas por diferentes instituciones respecto del cura.
En su análisis dijo que “el Ministerio Público hizo su labor pensando que había una persona que en el ejercicio de la dignidad de su cargo -de sacerdote- aprovechándose de ello, abuso sexualmente de una menor y de forma reiterada, lo cual tuvo por acreditado el tribunal”, sostuvo.
La fiscal subrayó que de forma posterior, el Senado estimó quitarle la nacionalidad por gracia lo cual resulta evidente si se tiene a la vista que es un beneficio que no puede mantenerse a personas que cometen este tipo de delitos.
Además, resaltó que la decisión del Ministerio del Interior resolvió su expulsión para cuando cumpla el total de su condena.
Finalmente, precisó que la familia de las víctimas pueden sentirse reparadas por el Estado.
