El segundo oleoducto para transportar combustible aeronáutico que se construiría tras la ampliación del terminal aéreo capitalino, cruzaría Maipú y Pudahuel, situación que pone en alerta a los alcaldes de estas comunas.

Recordemos que el primer ducto que abastece al aeropuerto fue instalado en Maipú en 1994 y gran parte de esa estructura va paralela a las autopistas Américo Vespucio Sur y Américo Vespucio Norte.

El proyecto de la Sociedad Nacional de Oleoductos (Sonacol), que opera desde 1957, se encarga de trasladar el 98% de los combustibles refinados, al igual que la totalidad del gas licuado desde Valparaíso y Bío Bío hasta la región Metropolitana.

Según consignó El Mercurio en su versión impresa, debido a los cálculos de la empresa ante la creciente demanda de combustible del aeropuerto, la capacidad del oleoducto llegará a su tope en 2018.

De esta manera, el segundo oleoducto que se pretende construir en el aeropuerto de Santiago tendrá 27 kilómetros de extensión, un diámetro de 32,4 centímetros y enterrado a 1,8 metros de profundidad, proyecto de US$ 60 millones que se encuentra en el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental.

La alcaldesa de Maipú, Cathy Barriga, señaló al matutino que rechaza al proyecto al ser riesgoso para los habitantes de la comuna. La jefa comunal asegura que la empresa no se hace cargo de posibles emergencias ambientales.

En tanto, el alcalde de Pudahuel, Johnny Carrasco, valoró la iniciativa que evita 600 viajes diarios de 300 camiones con combustible al aeropuerto, considerando la contaminación.

No obstante, señaló al periódico que “encontramos algunos aspectos débiles. Uno que nos llama la atención es que hay un impacto en la calidad del aire, que el titular del proyecto no reconoce y lo estaría abordando a través del Plan de Descontaminación de la región Metropolitana”, aseveró.

En tanto, el gerente de operaciones de Sonacol afirmó al medio de comunicación que si bien el ducto pasa por zonas residenciales, éste es compatible con la vida urbana y que cuenta con un sistema de monitoreo las 24 horas.