Pese a que se han esforzado por aclarar que operan con normalidad, al interior de Clínica Las Lilas se siguen revelando nuevos antecedentes que explican la delicada situación financiera que tiene a este centro de salud privado al borde de la quiebra.

El 28 de marzo pasado, el gerente general, Eduardo Serradilla Guerrero, presentó ante el Octavo Juzgado de Garantía de Santiago la ampliación de una querella criminal por el delito reiterado y consumado de estafa, apuntando en ella y a ex ejecutivos de la clínica.

Una nueva arista dentro de la acción legal presentada en agosto del año pasado, donde se individualizaba al exgerente general, Víctor Estrada Avendaño, como el principal responsable de cuestionados movimientos financieros, que involucraban empresas relacionadas al propio ejecutivo.

Los nuevos antecedentes a los que tuvo acceso Radio Bío Bío dan cuenta de “un ardid para aparentar la existencia de un estudio de impacto ambiental”, para defraudar a la Inmobiliaria Las Lilas por una cifra que supera los 110 millones de pesos, pero también de una serie de facturas por conceptos de gastos operacionales, que según los querellantes jamás se debieron cargar a la clínica, con un perjuicio de más de $1.200 millones.

Un estudio de papel

A mediados de 2015 (agosto o septiembre, de acuerdo a lo que señala la querella), Asesoría Integral de Empresas Asiem S.p.A, ofreció a Inmobiliaria Las Lilas la “elaboración de un Estudio de Impacto Ambiental para identificar las acciones de mitigación y prevención a aplicar en relación con la construcción y operación de un gran centro clínico”, es decir, una nueva Clínica Las Lilas.

Esta iniciativa jamás se concretó, pero habría implicado contratar a Asiem para elaborar el mencionado estudio (también conocido como “Proyecto Gami”) por un valor que superó las 4.400 UF, poco más de 110 millones de pesos.

Según la demanda, la empresa Asiem estaba vinculada a Estrada Avendaño y recibió los pagos a través de 4 facturas, pese a que dicho estudio, no se realizó.

“Se simula un contrato de prestación de servicios supuestamente para la elaboración de un estudio de impacto ambiental que sólo tiene la apariencia de tal, el cual es ideológicamente falso”, sostiene la querella.

Consultas no realizadas

1.218 millones de pesos en pérdidas por concepto de consultas médicas no realizadas es el resumen de otra de las prácticas irregulares denunciadas a la justicia en esta acción legal.

Aquí se habrían “cargado gastos de operación de MN Clinical S.A. a nombre de Clínica Las Lilas S.A, que en definitiva no eran para la operación de esta”.

Según se desprende de la querella, para recuperar dichos gastos “la gerente de finanzas del gerente Estrada Avendaño enviaba un correo, indicando el detalle de los gastos realiCifras que no cuadranzados por Clínica Las Lilas, para que dichos montos se facturaran por el Centro Mëdico y Diagnóstico Las Lilas S.A a Isapre Masvida, por concepto de facturas jamás prestadas“.

El ahora gerente general de la clínica, asegura que avisó de estos cargos sin respaldo al Presidente del Holding de Empresas Masvida, Claudio Santander.
TramiteSol(2)

Cifras que no cuadran

En el escrito, Eduardo Serradilla relata que una vez que asumió el cargo, a la “nueva administración de Clínica Las Lilas le resultó un verdadero misterio cuadrar su contabilidad”.

Sobre este punto, la ampliación de la querella describe que esta adulteración de los ingresos de la institución se hizo “mediante el ardid de efectuar provisiones de ingresos no justificadas que, en caso alguno, correspondían a hechos económicos”.

Adulteraciones que eran por concepto de días cama y derechos de pabellón, con ingresos que en definitiva “eran evidentemente inferiores”. Esta práctica, según una auditoria, se habría efectuado entre 2010 y 2015, totalizando 19 mil 66 millones de pesos.

A continuación puedes consultar el documento que da cuenta de la ampliación de la querellla:

Ampliación de Querella Clínica Las Lilas by BioBioChile on Scribd