Este martes se dio a conocer que el juez Sergio Henríquez, quien fue utilizado como escudo por un reo para lograr escapar del Juzgado de Garantía de San Bernardo, presentó licencia médica como consecuencia del traumático momento que vivió.

El magistrado fue arrastrado por Leonardo Azagra, apuntado con una pistola, por tres pisos del edificio hasta el hall, sector donde efectuó disparos para disuadir a la seguridad y arrancó en un taxi que robó a la salida.

Luego de este hecho, Henríquez se refirió en El Mercurio por primera vez a los momentos de terror que vivió en manos de este delincuente, el que se encontraba preso por haber asesinado a una joven luego de que ella se resistiera a ser abusada.

A pesar de que especialistas le recomendaron evitar referirse al tema como medida para evitar revivir el trauma, el abogado explicó al medio que llegando al primer piso se tiró al suelo para que Azagra lo soltara.

“A la salida de ese tribunal había un peldaño en la puerta, y yo aproveché la oportunidad. Hice como que me tropezaba, me solté y me tiré al suelo“, relató Henríquez, quien se puso las manos en la nuca para que el reo no lo atacara.

Explicó que luego de eso sintió un disparo cuando el sujeto ya estaba saliendo del Juzgado, quien efectuó más de uno al aire. “Yo escuché uno, después no sé. No recuerdo cómo me paré del suelo, o si alguien me levantó“, indicó.

Toda esta situación hizo que los jueces del Juzgado de San Bernardo se inhabilitaran para dictar resoluciones al respecto, argumentando que “carece de imparcialidad necesaria para garantizar el pleno ejercicio del derecho del imputado a ser juzgado por un juez imparcial”.