Uber llegó a Chile y se estableció como una muy buena alternativa para movilizarse por Santiago y también para aquellos conductores que querían generar ingresos extras.

Juan Aracena, conductor de la plataforma fue uno de ellos, quien apostó por combinar su trabajo, junto a realizar recorridos en Uber.

El afectado comentó a BioBioChile que pasaron unos 5 meses y todo parecía ir bien. Sin embargo, el pasado 11 de octubre, cuando se disputaba el partido de Chile v/s Perú, el trabajador a eso de las 22:00 horas recibió en la aplicación la alerta para ir a buscar un pasajero cerca del Mall Plaza Vespucio, en el lugar “dos tipos de unos 20, no más de 23 años se subieron y después de unas vueltas me encañonaron”, relató.

“Me llevaban a dirección Santa Rosa, cuando le empiezo a preguntar si era la dirección cuando íbamos en ruta, me dijo que se le acabó la batería y el tipo de atrás me pone el cuchillo en el cuello y el de al lado una pistola en las costillas, me llevaron al sector de Lo Martínez y me dejaron botado”, detalla aún con impotencia el conductor del Honda Civic Híbrido del año 2010 que le fue arrebatado tras esta situación.

Aracena señala no haber tenido problemas antes, pero las cosas cambiaron cuando comenzaron a recibir pasajeros que pagan en efectivo.

Las “inscripciones que hacen las personas que van a subir con efectivo, no tienen ningún punto de validación. Puedes inventar un correo electrónico y un teléfono, no te piden ni dirección, ni carnet de identidad, ni nada. Entonces cualquier persona puede hacer mal uso de ello. De hecho, ya lo están haciendo, de hecho me pasó a mi”, sentencia.

Luego del traumático episodio, el conductor se vio en plena calle y sin auto. Una camioneta que iba de paso, lo llevó hasta la comisaría 44 de La Pintana la cual era la más cercana.

Ahí, realizó la respectiva denuncia y al otro día se dirigió a calle Encomenderos, donde queda la oficina de Uber.

“Fui a exponerles mi caso donde ellos me dijeron que iban a cooperar en todo sentido con la investigación, y una vez que termine la investigación me dirían si me pueden ayudar en algo, pero aparte de eso nada”.

Además, agregó que se dispusieron a entregar los antecedentes de quien contrató el servicio, pero según Aracena estos datos son completamente falsos.

Tomar contacto con la empresa también ha sido bastante complejo para el conductor, ya que “no hay números directos” y señala que solamente existen dos formas de contactarse con Uber: vía mail y presencial. Pero no existe una línea a la que puedan recurrir los conductores en caso de emergencia como en este caso.

“He mandado un par de correos, les planteé mi situación y si me podían ayudar de alguna forma económica y me dijeron que no , que no había ayuda económica, al menos en esta etapa no, no sé si cuando aparezca el auto (…) eso sí a mi ellos no me han dicho no te preocupes, si cuando aparezca el auto nosotros te vamos a responder”, recalca el conductor.

Sumado a esto alega que su automóvil era vital para su otro trabajo, puesto que se desempeña en otra labor donde es necesario usar un vehículo.

Según el chofer no existe ningún contrato formal con Uber, sólo ciertas obligaciones que piden como “carnet de identidad, carnet de conducir, hoja de vida del conductor y los papeles del auto que estén en regla”.

“Donde la embarraron y está la escoba es con este tema de que abrieron los viajes pagados y ahí se puede inscribir cualquier persona, y no es malo que se inscriba gente , pero no hay un filtro“, éste -según el conductor- es el gran problema de seguridad que hoy día presenta Uber.

Ahora que Aracena se moviliza en Uber ya no como chofer, sino como pasajero, cuenta que los conductores le han relatado que no hay muchos antecedentes de robos de autos. “Se supone que yo soy el segundo, y que en el primer caso apareció el auto y no hubo mayores problemas”, cuenta.

En estos momentos su situación es más bien incierta y hasta el momento no hay pistas del vehículo robado.

Además del mal momento vivido por el violento robo “lo peor de esta situación es que aún estoy pagando el auto, y falta su buen rato para poder pagarlo, casi iba a cumplir el año”.

En tanto Uber señaló a BioBioChile lo siguiente:
“Lamentamos que uno de nuestros socios conductores haya sido víctima de esta situación. Ya nos hemos puesto en contacto con él, y lo apoyaremos con las herramientas a nuestro alcance. Cooperaremos con las autoridades en su investigación”.