A las 11:30 horas, comenzó la 41° versión del Tedeum Evangélico de Fiestas Patrias en la Catedral Evangélica de Chile, ubicada en Estación Central.

Con un importante énfasis en los problemas sociales, la ceremonia es presidida por el obispo Emiliano Soto, pastor de la Iglesia Evangélica Pestecostal Reformada, y que cuenta con la presencia de la Presidenta Michelle Bachelet.

En su discurso, Soto instó a orar por Chile “por mayor justicia, chilenos que sienten que la justicia solo funcionan, para el rico y el poderoso. Pocas veces para la clase media, y nunca para los más pobres, por leyes que garantizan la no penalidad, A diario vemos a la delincuencia salir caminando desde los juzgados Quedan sin castigo quienes asaltan o matan”.

Los chilenos tienen desconfianza de todo, sienten que su sistema de salud funciona bien, mientras sus enfermedades y dolencias no tengan un elevado costo, pero cuando un ciudadano tiene que enfrentar una enfermedad catastrófica, quedan solos y sin apoyo, la excusa es siempre, un vacío legal.”, enfatizó.

En ese marco, el obispo clamó “por los ancianos en edad de su jubilación, que han sido claros en sus demandas y manifestaciones. No quieren más estar en el sistema de AFP y buscan a la brevedad una solución concreta y rápida que termine con su problema presente por las pensiones bajas casi miserable, provocado por un sistema nefasto y con el incierto futuro previsional de millones de compatriotas“.

Además, criticó que “toda nuestra clase política, tanto de oposición y gobierno, están más preocupados de sus propios proyectos y de su agenda que de los problemas de la ciudadanía“.

“Oramos por los elementos que sustentan la economía de Chile, que sea mejorada. Oramos para que nuestros representantes, se reconecten con la ciudadanía y se cubran sus necesidades”, añadió.

A la salida de la ceremonia, la Presidenta Bachelet dijo que “sentí que lo que nos ha pedido a todos, es que todos trabajemos con fuerza para que Chile sea un país más unido, más fraterno y más solidario, en donde podamos resolver las necesidades de tantos”.

El empresario Leonardo Farkas, indicó a la señal oficial que “los evangélicos me eligieron el hombre del año (…) Yo soy muy amigo de (Eduardo) Durán. (…) En el discurso fueron hartos palitos para todo el mundo“.

“El dinero que yo tengo es de Dios, yo soy un administrador de Dios (…) La gente trabaja mucho, se saca la mugre y tiene mucha suerte. El secreto es que yo rezo y Dios me ha ayudado”, agregó.

Hasta el recinto de Estación Central, llegó gran parte del gabinete ministerial, los presidentes de las Cámaras de Diputados y el Senado, los Comandantes en Jefe de las Fuerzas Armadas, entre otras figuras públicas, como el empresario Leonardo Farkas.

Por su parte, Carabineros estableció diversos desvíos de tránsito en las cercanías de la Catedral Evangélica, ubicada en la Alameda con Jotabeche.