Luego de las medidas disciplinarias emitidas contra 25 alumnos de la Universidad Alberto Hurtado, un grupo de cerca de 70 alumnos ingresaron hasta la oficina del rector, Eduardo Silva, para pedir la revocación de la medida y la reintegración de los estudiantes.
Tras haber asegurado no sentirse intimidado por los hechos y de recibir el apoyo de 29 rectores de otras instituciones, Silva volvió a referirse a los hechos ocurridos.
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El rector comentó que para él es imposible impedir que los comités curriculares tomen las decisiones que tengan que tomar, haciendo referencia a la autonomía universitaria de las entidades, y que se apliquen los debidos procesos.
Agregó que las peticiones de los estudiantes se hicieron a través de amenazas, incluso calificando como una extorsión el ingreso de los estudiantes a su oficina.
Sobre la movilización en la casa de estudios, que mantuvo una toma de las dependencias por un mes, aseguró que nunca recibieron un petitorio de parte del estudiantado y que nunca hubo una disposición clara al diálogo.
La funa de parte de los estudiantes terminó con cinco de ellos detenidos y formalizados por daños y lesiones contra Carabineros, quedando con arraigo nacional por 90 días mientras dure la investigación.
