Este fin de semana fue la tercera vez en un mes que entran a robar al jardín infantil y sala cuna “Globito”, de Curicó, en la región del Maule. Aunque esta vez fue especialmente desagradable, pues los antisociales defecaron al interior del lugar.

Los delincuentes vulneraron rejas y accesos, rompieron vidrios y muros, y sustrajeron especies, además de dejar la nauseabunda “marca” en el parvulario curicano.

Romina Cortés, una de las funcionarias, señaló que la vez anterior sufrieron el robo de la amplificación del recinto. Sustrajeron parlantes, herramientas, e incluso un cilindro de gas; elementos que servían para atender a los 140 menores que acuden al jardín.

Cortés sostuvo que, más allá de los daños causados, le molesta que los atacantes se hayan dado el tiempo de defecar en el lugar. “Incluso se limpiaron asquerosamente con un delantal de una de las manipuladoras de alimento”, agregó.

Solange Catalán, encargada del centro que pertenece a la Junji, precisó que esta vez el valor del robo es bajo, comparado con el costo de reparar los daños causados. Aseveró que esto ocurre frecuentemente debido a las escasas medidas de seguridad del recinto.

Por su parte, la Gobernación de Curicó comprometió mayor vigilancia policial, además de un informe conjunto a la Junji de Maule.