Durante la mañana del martes, la alcaldesa de Molina, Priscilla Castillo, sufrió un asalto al interior de su vivienda en Romeral, en la región del Maule.

Cinco asaltantes tomaron como rehén a un repartidor de gas y lo ingresaron a la vivienda de la jefa comunal. Con ello intimidaron a la asesora del hogar y amarraron a ambos junto al hijo de Castillo.

Los sujetos tomaron joyas, dinero en efectivo y otras especies. Luego, huyeron en dirección desconocida. Tras las denuncias, el Ministerio Público designó a la fiscal Mónica Barrientos para llevar a cabo la investigación.

La Brigada del Crimen de la PDI, junto a otras unidades policiales, tras varios allanamientos en la Región Metropolitana, dieron con el paradero de algunos miembros de la banda delictiva: 2 sujetos fueron detenidos.

Fue fundamental el hallazgo de un parachoques en la Ruta 5 Sur, tras la huida de los asaltantes, pues la Policía de Investigaciones dio con la patente del vehículo.

Se trataba de un Uber contratado en la Región Metropolitana. Allí se incautaron armas, municiones y drogas, además de una placa institucional de Carabineros. Todos estos antecedentes fueron entregados al Juzgado de Garantía de Molina.

Esta mañana, la fiscal Barrientos anunció que los 2 sujetos serán formalizados por los delitos de robo con intimidación y robo en lugar habitado. Si bien anunció que los demás miembros de la banda “están plenamente identificados”, se reservarán esos datos para seguir con los procedimientos de la investigación.