Un evidente mal olor a pescado y el nerviosismo del conductor fueron motivos suficientes para que personal Carabineros de Talca fiscalizara un camión en la Ruta 5 Sur, logrando decomisar cerca de 2 toneladas de pescados.

Se trataba de un vehículo que tenía en su parte superior una estructura similar al de un sistema de refrigeración, pero sólo se trataba de una apariencia, porque en la zona de carga no tenía los equipos de aire acondicionado y tampoco de regulación de temperatura.

A pesar de ello transportaba un total de 1.800 kilos de merluza común, acopiados en cajas de plástico, precisó diario El Centro.

Tras el hallazgo el móvil fue retenido por los efectivos de la Tenencia de Carreteras, al igual que el conductor, que dijo provenir de Pelluhue y que tenía como destino el Terminal Pesquero de Santiago.

La capitán María Fernanda Contreras explicó que el chofer no contaba con la documentación de rigor que certificara el origen del producto y tampoco la correspondiente autorización sanitaria.

Ante esta situación, los carabineros procedieron al inmediato decomiso, dando cuenta a la autoridad correspondiente.

Un fiscalizador de la Seremi inspeccionó la carga y, de inmediato, certificó que los productos no contaban con condiciones sanitarias para su venta o consumo.

Por ello, emitió una notificación al conductor para el correspondiente sumario sanitario, además de coordinar con Sernapesca el posterior retiro de los productos y su destrucción en un relleno sanitario.

“Se trata de un producto que se encuentra claramente en malas condiciones, porque el transporte no era refrigerado. Además los pescados aún tenían las vísceras y el mal olor era evidente. Por ello, levantamos un acta de fiscalización y apertura de un sumario”, dijo Sergio Torres.

El fiscalizador explicó que las recomendaciones a la ciudadanía son adquirir estos alimentos en locales autorizados que cuenten claramente con certificación sanitaria. “Quienes no cumplen la normativa se ven expuestos a multas, según la infracción”, afirmó.