Monseñor Horacio Valenzuela encabezó ayer, la masiva celebración de la diócesis que abarca las provincias de Curicó y Talca en el Día de la Asunción de la Virgen. En cuya homilía hizo referencia principalmente al apoyo que hay que dar a los inmigrantes, así como también a los que están por nacer, en el marco del debate por la Ley de Aborto, señalando que ambos grupos “están en grave peligro, y desamparados”.
En el encuentro que congregó a parroquias y grupos pastorales de la diócesis de Talca, y en una multitudinaria misa ante unas cinco mil personas , el obispo entregó un mensaje de acogida, en el que destacaba apoyar a “los niños que están por nacer y que están en peligro de ser abortados, indefensos, y que esperan una oportunidad para disfrutar de la vida que Dios les quiere dar”,consignó el Diario El Centro.
Por los inmigrantes, el pastor indicó que “han venido de lejos, con grandes sacrificios, con mucha inseguridad, sin primos, sin compadres, sin ayuda. (…) Por eso cuánto vale para ellos la mano tendida, el rostro acogedor, el gesto cariñoso”, sostuvo.
Tras la misa, el obispo, consultado sobre si hay más por hacer sobre este colectivo, indicó que “hemos hecho harto, pero creo que estamos en deuda, así que ojalá que todos nos podamos poner una mano en el corazón y pensar lo que significa ser inmigrante”.
Además, en un gesto visible de esta celebración religiosa en favor de los inmigrantes, se les situó encabezando la procesión de la Virgen que llegó hasta el Gimnasio Regional de Talca, lugar que desde este año se utilizó para esta masiva fiesta.