La flora nativa tarda hasta 30 años en recuperarse de los incendios forestales, que hasta la mañana de este viernes ha consumido más de 289.974 hectáreas, según expertos.

Este tipo de siniestros es una especie de perversa tradición en nuestro país, afectando de forma irrecuperable la flora nativa y los bosques milenarios.

Al respecto, Mauricio Ponce, académico de la Facultad de Ciencias Forestales de la Universidad de Talca, comentó los riesgos congénitos que ocasionan estos desastres para el país.

“Hay presencia de de especies que con lo sucedido están en serio riesgo de desaparecer. En ese espectro entran las herbáceas y arborescentes como pudiera ser el Quillay, el mismo Peumo u otras como la Patagua” destacó.

Las especies mencionadas por el experto son endémicas y están presentes en la zona costera, los valles y la precordillera andina. Durante el verano es la estación donde los bosques de características mediterráneas se deben proteger del fuego por las temperaturas y las labores agrícolas, aspecto destacado por el experto.

“El uso del fuego tanto el labores agrícolas durante la época estival y el excursionismo propio de esos meses debiera estar por una parte restringido a cero en lo que es el agro y delimitado en zonas específicas para lo que son las actividades derivadas del montañismo por ejemplo”, aseguró.

Sin embargo el avance de los incendios forestales y su impacto en el medioambiente podría afectar aún más a las especies y su recuperación natural.

“Todo depende de las condiciones del lugar, pero al menos me atrevería a decir que en 25 o 30 años es el margen de tiempo para la recuperación de la flora nativa de nuestro país tras este desastre”, finalizó Ponce.

Árboles nativos en peligro | Universidad de Talca
Árboles nativos en peligro | Universidad de Talca