La docente Paulina Espinoza fue desvinculada de la Universidad Católica del Maule el pasado martes 27 de diciembre, luego de haber presentado un libro sobre el VIH Sida en Chile, aunque las autoridades aseguraron que se debe a la reducción de costos de la casa de estudios.

La académica, quien antes fue vicerrectora de la misma institución, se dice que fue removida por presuntamente tener “entroncones” con el rector de la universidad, Diego Durán Jara, tras casi siete años laborando en la Facultad de Medicina.

Por lo anterior, grupos de estudiantes y cercanos de la docente no descartaron que ésta desvinculación definitiva se deba a la deteriorada relación y la presentación de un libro que aborda el sida en Chile y que pone una importante carga sobre el Estado, además de ir en contra de lo que la propia casa de estudios piensa del tema.

El lanzamiento del libro “Sida en Chile, historias fragmentadas” sería lo que llevó al rector de la universidad a tomar la decisión, según consigna The Clinic.

El texto escrito por los periodistas Víctor Hugo Robles y Amelia Donoso, fue presentado por la exdocente en el Centro de Extensiones de la institución el pasado 28 de noviembre, junto a los autores y el Seremi de Salud, Rafael Santander.

Su repentino despido y la justificación que esgrimieron hicieron pensar a la académica que la medida tendría otra razón, y así lo hizo saber a través de un correo que envió a personal con el que trabajó, asegurando que el directivo utilizaría este pretexto para hostigarla y cuestionar su labor, ya que el libro y su temática irían en contra de lo que la casa de estudio pretende enseñar.

Movilizaciones en su apoyo

Tras el despido de la catedrática, la Coordinadora Nacional de Atención en VIH de la región entregó una carta al Obispo de Talca, Monseñor Horacio Valenzuela, quien además ocupa el cargo de Canciller Máximo de la Universidad Católica del Maule.

Esta organización se enfoca en la prevención del virus, trabajando desde hace años trabaja en conjunto con la profesora y la universidad para tratar la problemática a nivel estudiantil.

Para el secretario ejecutivo del grupo, Michael Díaz, “bajo el punto de vista de nuestra organización, con esto encubren la verdadera razón: les incomodó lo que hizo con el libro”.

Otro grupo en contra de la polémica medida adoptada por el rector Durán corresponde al Centro de Alumnos de Medicina de la institución (CAA). En una declaración pública, aseguraron que las “autoridades superiores de manera unilateral pasaron a llevar cualquier tipo de conducto regular” en el hecho, por lo que se declararon en “estado de movilización”.

Para el Sindicato de Académicos de la universidad el despido profesores sin motivos de peso, y cerca de fin de año, se ha tornado una práctica común en la institución.

Por lo anterior, se declararon en “situación de alerta. Ya sabemos que las desvinculaciones no se producen en el marco de la reglamentación universitaria, y que podemos esperar cualquier otra situación lamentable”.