El próximo martes será formalizado Jorge Escobar Escobar, como eventual responsable de la desaparición y la muerte del pequeño Tomás Bravo. La Fiscalía solicitó ampliar hasta entonces la detención, en una audiencia donde se detallaron pruebas que presumen su participación en el homicidio del menor.

Por cerca de 90 minutos se extendió ante el Juzgado de Garantía de Arauco el control de detención de Jorge Eduardo Escobar Escobar, quien compareció desde la Brigada de Homicidios de la PDI en Talcahuano.

Tal como lo había adelantado, el fiscal José Ortiz solicitó esa ampliación, de manera de tener el resultado de la autopsia a cargo del Servicio Médico Legal, peritaje que dará luces sobre la causa de muerte de la víctima, Tomás Bravo Gutiérrez, de 3 años.

A ese antecedente se sumarán otras pruebas, algunas de las cuales fueron adelantadas por el persecutor al tribunal, entre ellas pericias de la PDI que revelan que la recolección de los hechos -desde que concurrió a alimentar animales con su sobrino nieto hasta que lo pierde de vista- fue preparada.

“Lo que él relata en cuanto a la manera de ocurrir los hechos, tiene un relato que policialmente nos llamó la atención (…) es un relato aprendido, un relato absolutamente estructurado”, detalló.

Otro antecedente al que se refirió Ortiz es un plano del lugar de la desaparición, el que fue encontrado en la casa de Escobar dentro de una libreta, un mapa dibujado por el propio imputado.

Se espera que este domingo el trabajo del Médico Legal termine, previéndose la entrega del cuerpo de Tomás a su familia y se afine el peritaje con la causa de muerte que espera el Ministerio Público.

Sobre la situación de su cliente, el tío abuelo imputado, que fue trasladado al penal Bío Bío para esperar su formalización, el defensor penal Pedro Aguilera reiteró su llamado a no adelantar juicios contra él.

En la investigación, que recién comienza, son parte además del padre de la víctima, Moisés Bravo, la Defensoría de la Niñez, la Fundación Amparo y Justicia, que representa a la madre del menor, Estefanía Gutiérrez, rechazando la jueza Liliana Medrano la querella de la abuela materna por tener preferencia para actuar su hijo, el padre del niño.