La ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt, aseguró que el impacto del cierre de Bocamina 1, fijado para fines de este año, será notorio para los habitantes de la comuna de Coronel, región del Bío Bío.

En medio del plan descarbonización de la matriz energética fue cuando se anunció que varias termoeléctricas a nivel nacional, iban a dejar de operar, principalmente en zonas denominadas de sacrificio.

Consultada la secretaria de Estado sobre cómo avanza el proceso en Coronel, dijo que hasta el momento no hay motivos para que este cierre no se concrete.

“Estamos hablando de una importante reducción de las emisiones que va a tener un efecto directo en la vida de las personas”, valoró.

En esa misma línea, el seremi de Energía en el Bío Bío, Mauricio Henríquez, sostuvo que el plan para el cierre de la termoeléctrica avanza sin problemas, aunque sin entregar más detalles.

De todos modos, adelantó que la energía que se dejará de producir será solventada por proyectos eólicos de la zona.

El alcalde de Coronel, Boris Chamorro, espera que la empresa y el Gobierno cumplan con el compromiso del cierre de esta termoeléctrica en el plazo acordado.

Además dijo que hasta el momento, al menos él, no conoce el plan de cierre que trabaja Enel con el Gobierno.

Recordemos que también está contemplado el cierre de Bocamina 2 para mayo de 2022.