El intendente del Bío Bío, Sergio Giacaman, insistió en que la destitución de dos funcionarios públicos la semana pasada fue lo que correspondía en la actual crisis sanitaria.

Alvaro Toledo, asesor de la Gobernación, reconoció el error por el manejo en estado de ebriedad, pero subrayó en que se trata sólo de una falta desde el punto de vista legal, y por ello calificó como exagerada la sanción.

Toledo y Mario Signorelli, director provincial de Educación, fueron sorprendidos en Hualpén a las 02:00 horas la semana pasada, a bordo de una camioneta con cajas del programa Alimentos para Chile que debían ser distribuidas.

Cedida a RBB
Cedida a RBB

El parte de Carabineros constató un manejo bajo los efectos del alcohol y la circulación sin salvoconducto en horas del toque de queda, siendo puestos a disposición de la Fiscalía, que abrió una causa en la cual el tribunal declaró ilegal la detención.

Tras el incidente, el intendente Sergio Giacaman ordenó la destitución de los funcionarios públicos, medida que esta jornada en entrevista con Radio Bío Bío volvió a defender.

Acusado se defiende

En la misma línea que una declaración el fin de semana de Mario Signorelli, su amigo y también militante de RN, Alvaro Toledo, si bien reconoció como un error su actuar, cuestionó al intendente, al calificar como exagerada la reacción.

Efectivamente el defensor Ricardo Terán, quien argumento con éxito la detención ilegal en el Juzgado de Garantía de Talcahuano, explicó que tanto la vulneración del toque de queda como el manejo bajo los efectos del alcohol sin causar daños es sólo una falta que no contempla la privación de libertad.

De allí que al menos Toledo adelantara a La Radio las acciones administrativas para intentar revocar la destitución y en lo legal ejercer la defensa respecto de la falta que se le imputa por el Ministerio Público.