Cada vez son menos quienes no respetan los toques de queda en Concepción, en comparación con el inicio de la medida de restricción de movimiento, en marzo recién pasado. Sin embargo, en un recorrido que Radio Bío Bío realizó junto a infantes de marina, pudo observarse a conductores fuera del horario permitido y peatones en las esquinas de las poblaciones.

Desde el 19 de marzo que los infantes de marina apoyan las estrategias sanitarias, con el cumplimiento del toque de queda, y también las tareas de seguridad, en rondas junto a Carabineros y la PDI.

A bordo de un imponente Humvee, un especie de jeep cuadrado y ancho, de fabricación estadounidense, que trepa por cualquier superficie, acompañamos a los infantes en un recorrido que partió en un check point en Camilo Olavarría, donde ya aguardaban más uniformados y carabineros de la Cuarta Comisaría de Coronel.

Puntualmente a las 22:00 horas comenzaron los controles y la mayoría de los conductores argumentaba un leve atraso para regresar a casa desde el trabajo. Ahí se cumple una labor más bien informativa, resaltó el capitán de Fragata Gonzalo Cárcamo, comandante del Batallón de Infantería Nº 31 Aldea de Talcahuano.

Pero en ese mismo lugar, un joven conductor presentó hálito alcohólico de modo que fue detenido por carabineros tal como lo indica el procedimiento, para dar luego cuenta al fiscal de turno.

El riguroso plan trazado llevó después al comandante hasta la Sexta Comisaría de San Pedro de La Paz, donde junto a carabineros se inició una ronda masiva, en la que fue necesario equiparse con un pesado chaleco antibalas y casco. Y es que en procedimientos anteriores, se han encontrado con sorpresas, expuso el comandante Cárcamo.

La caravana de vehículos de infantería de marina, policiales, incluyendo motoristas, se desplegaron a una alta velocidad, reducida sólo cuando estrechos pasajes lo ameritaban. Al menos cuatro transeúntes fueron arrestados en un breve lapso en Boca Sur y mientras la ronda de carabineros prosiguió, los infantes de marina partieron a Concepción, cruzándose con uno o dos automóviles en toda la ruta.

Circulan mucho menos que hace dos meses, agregó el comandante Cárcamo.

El itinerario incluía luego Chiguayante y puntos especialmente seleccionados en función del análisis practicado día a día, en el que resulta de gran ayuda la información que entrega la comunidad. Y así, sin parar, hasta las cinco de la mañana, hasta que un turno diurno los reemplaza hasta la noche siguiente.