La Superintendencia de Educación habría descartado a los padres y apoderados del Colegio Almondale Valle la posibilidad de nombrar un administrador provisional para el establecimiento subvencionado que mantiene congelado el proceso de matrícula, dejando en la incertidumbre el futuro de sus casi 800 alumnos para el año escolar 2020.

La semana pasada debía haber comenzado la matrícula en el colegio que hace ocho años funciona en el sector Valle Noble de Concepción, proceso que fue congelado ante las acciones legales de la Fundación Almondale Valle para intentar revertir la negativa del Ministerio de Educación a la solicitud para convertirse en particular pagado.

Tras ser informados de la decisión, el Centro de Padres del Colegio Almondale Valle, respaldado por parlamentarios, inició una serie de contactos y en ese marco es que fue recibido en Santiago por el superintendente Cristian O’Ryan, instancia donde aprovecharon para expresar su preocupación por la situación que viven y lo que buscan de las autoridades, según informó Guillermo Avendaño.

“Hay limitaciones, pero la verdad es que lo que nosotros estamos buscando con estas reuniones es que las autoridades hagan cumplir al sostenedor su responsabilidad que tiene con los niños y esperamos que la superintendencia nos de una respuesta dentro de enero, porque no podemos esperar que llegue marzo con esta incertidumbre”, afirmó.

Actualmente, en la Corte de Apelaciones de Concepción hay recursos judiciales en trámite, tanto del Colegio Almondale Valle como de los apoderados. Por su parte, el viaje que realizó el Centro de Padres es parte de los caminos que se buscan para asegurar las clases para los casi 800 alumnos que están en el limbo.

Entre los legisladores que acompañaron a los apoderados estaban el diputado Enrique van Rysselberghe y el senador Alejandro Navarro, quien tras la reunión dio cuenta de las casi nulas esperanzas obtenidas del superintendente O’Ryan frente a la solicitud de un interventor para el establecimiento.

“Muy buena disposición para abordar esta situación, pero graves limitaciones. La superintendencia es un sabueso sin dientes, es decir, un órgano fiscalizador que tiene muy pocas atribuciones, muy pocos recursos”, expresó Navarro.

La solicitud de un administrador provisional se hizo el jueves ante la oficina de la Superintendencia de Educación del Bío Bío, y si bien aún no hay una respuesta oficial, lo señalado aparentemente por el titular de la repartición descartaría el interventor como solución al delicado e inédito conflicto.