El Gran Concepción registró uno de los fines de semana más violentos en materia de homicidios. En total se perpetraron cuatro asesinatos en los que las víctimas fueron ultimadas a balazos o puñaladas.

El último de éstos se consumó la tarde de este domingo cuando la víctima de 30 años, Jairo Sobarzo Lagos, con antecedentes policiales, murió en el Hospital Regional de Concepción.

El hombre recibió cinco tiros siendo trasladado al centro asistencial por sus familiares, por lo que carabineros de la Segunda Comisaría penquista no encontraron el cuerpo en el lugar, hasta donde concurrieron tras recibir un llamado telefónico alertando sobre el incidente registrado en la vía pública, en la población Pedro del Río Zañartu, junto a la costanera, según indicó el mayor Joel Ríos.

“Tuvo cinco impactos balísticos en distintas partes del cuerpo, cuello, tórax, piernas, donde también tuvo una fractura, lo que en horas de la tarde le provocó la muerte”, explicó.

La persona asesinada, Sobarzo Lagos, es la misma que hace 10 días fue arrestada por los mismos carabineros de la Segunda Comisaría tras cometer un “pulgazo” en la costanera.

Por ese delito, se transformó en el primer detenido en la zona después de la modificación legal que ahora califica este ilícito como un robo con intimidación y no como un simple robo de accesorios. Igualmente, tras esa detención, quedó con una medida cautelar no privativa de libertad.

La serie de crímenes comenzó el viernes por la noche cuando un hombre de 55 años fue acribillado en Coronel, en su domicilio de la Villa Amanecer; seguidilla que sumó otros dos delitos el sábado, en Concepción.

El primero de éstos ocurrió en Lorenzo Arenas, donde Manuel Roa Moreno (33) fue baleado en las piernas; y en la noche, Luis Torres Villegas, fue apuñalado en las cercanías de la Plaza Perú. Ambos murieron en el Hospital Regional.

Para estos casos, el Ministerio Público encomendó las pesquisas a la Policía de Investigaciones.