Un nuevo quiebre -esta vez al interior del Colegio de Abogados de Concepción- se produjo como consecuencia del conflicto entre el gremio y la Corte de Apelaciones, que hace unas semanas amenazó con el desalojo si la Orden no entrega voluntariamente las instalaciones donde funciona en el primer piso del Edificio de Tribunales.

A través de una carta abierta, siete consejeros acusan al expresidente del Colegio, Ignacio Sapiaín, de haber actuado sin consultar a sus pares para defender la estadía del gremio en las dependencias donde ha permanecido por décadas y que el Poder Judicial solicitó ante la falta de espacio para el trabajo de los juzgados.

Al respecto, el abogado Sapiaín respondió que su conducta y las medidas adoptadas se han ajustado al acuerdo adoptado en conjunto entre el Colegio, la Corte Suprema y el gobierno, cuando el Ejecutivo entregó al Poder Judicial la propiedad del Edificio de Tribunales.

“Quienes hoy formamos parte del Consejo, hemos censurado el actuar del consejero Sapiaín, dado que hemos sido objeto de un trato poco respetuoso y muchas veces grosero por parte de él, lo que ha entorpecido el avance en temas tan importantes como el que se refiere a las dependencias del Colegio”, señala el grupo de dirigentes liderados por abogada Riola Solano.

La pugna entre el Colegio y la Corte de Apelaciones penquista ya había generado un primer quiebre, pues por primera vez en años no se conmemorará el Día del Foro y la Magistratura, acto tradicional y único en el país, donde jueces y abogados celebraban la instalación del tribunal de alzada y el trabajo conjunto en la administración de justicia.