Constantes cortes de suministro eléctrico denunciaron los vecinos de un sector rural de Mulchén. Desde Frontel atribuyeron el problema a los robos de cables de cobre en la zona.
Los habitantes de Palermo Bajo están desde abril soportando la inestabilidad en la electricidad de sus hogares. Suspensiones que se han extendido por días y horas, pero que les ha impedido pasar una semana sin problemas.
El presidente del Comité de Desarrollo, Vicente Hormazabal, detalló que en el lugar viven cerca de 40 familias. Además explicó que lleva tres años en el sector y siempre han tenido estos inconvenientes, pero desde abril han ido en aumento.
También agregó que los cortes impiden que extraigan agua y han dañado algunos electrodomésticos.
El gerente de Frontel, Patricio Sáez, explicó que los problemas principalmente se han debido a robos de cables de cobre y el último, ocurrido este martes, por la tala de un árbol.
Según Sáez, estas reparaciones toman varios días, debido a los serios daños que se generan cuando existen robos, ya que también se ven perjudicados los postes.
Sin embargo, tanto el alcalde de Mulchén, Jorge Rivas, como el gobernador de la provincia de Bío Bío, Ignacio Fica, rechazaron lo ocurrido y aseguraron que estarán atentos a la situación de los vecinos.
Desde hace algunos años, Frontel había tomado la decisión de reemplazar los cables de cobre robados por cables de alumnio, como medida de prevención del ilícito.
Consultado al respecto, el gerente de la empresa, Patricio Sáez, reconoció que no se ha podido reemplazar el 100% del servicio en las zonas afectadas, por falta de stock.
Respecto a las familias, actualmente el suministro eléctrico ya está repuesto, pero aseguran que están desconfiados, pues no saben hasta cuándo les durará.
