Un informe de Contraloría detectó serias irregularidades en la Junji con un detrimento para el fisco de más de 235 millones de pesos, debido a ocho jardines infantiles de la región del Bío Bío que quedaron paralizados en su construcción durante la administración de Michelle Bachelet.

Los antecedentes serán remitidos a la Fiscalía y al Consejo de Defensa del Estado, para buscar a los responsables.

El cese de los trabajos encendieron la alerta en la Seremi de Educación, respecto de qué estaba ocurriendo con estas obras, las que no presentaron avances a pesar que deberían haber estado finalizadas.

Por lo mismo, el seremi de la cartera, Fernando Peña, llevó los antecedentes a la Contraloría, entidad que emitió las conclusiones de la indagatoria con resultados lapidarios.

El ente fiscalizador detectó el pago de partidas que nunca fueron ejecutadas, cuyo monto supera los 235 millones de pesos.

Peña indicó que los perjuicios corresponden solamente por “las diferencias entre los estados de pago y estados de avance de estas obras paralizadas”.

También se hallaron incumplimientos en la inspección técnica de los trabajos, ya que la Junji no cuenta con este tipo de personal, así como también faltas en los seguros por más de 98 millones de pesos.

Debido a esto, el seremi informó que el ente fiscalizador enviará estos antecedentes a la Fiscalía y también al Consejo de defensa del Estado.

Uno de los recintos que más preocupa -por la cantidad de niños que alberga y que necesitan mejorar su infraestrutura- es el de la Costanera Sur en el sector Pedro de Valdivia Bajo en Concepción.

Así lo informó la directora de la Junji, Alejandra Navarrete, quien espera tener licitado nuevamente este jardín a fin de año, para así poder terminarlo a la brevedad.

Además, la Contraloría detectó incumplimientos en las bases administrativas y especificaciones técnicas de las licitaciones, dando cuenta de un trabajo defectuoso con materiales que no serían los adecuados.

En ese sentido, las boletas de garantías que ya están vencidas, como es el caso de la sala cuna y jardín infantil Sol Naciente de Tubul, involucran un monto superior a los 37 millones de pesos.