La Municipalidad de Coronel espera que se sancione a las empresas responsables de los episodios de ruido y malos olores ocurridos en la comuna este sábado.

Lo anterior, luego de la pésima noche que pasaron en Coronel, especialmente en la Villa Alegre y Lo Rojas, por dos episodios casi paralelos que, inicialmente, no estarían relacionados, aunque ocurrieron en lugares no muy distantes entre sí.

Por un lado, desde la Pesquera Camanchaca emanó un repulsivo y penetrante olor, que provocó vómitos y dolores de cabeza en vecinos inmediatos, algunos de los cuales terminaron en centros asistenciales.

Y casi al mismo tiempo, un estruendoso ruido sacudió a los vecinos de la Termoeléctrica Bocamina, quienes temieron una explosión inminente.

Por ello, personal de la seremi de Salud del Bío Bío, y de la municipalidad de Coronel, inspeccionaron esos puntos; en la pesquera se verificó la presencia de vahos de procesos de producción, por lo que se abrió un sumario sanitario, misma decisión adoptada tras fiscalizar la termoeléctrica, donde el origen del descomunal ruido sería una válvula de seguridad de la caldera, según expuso el seremi Héctor Muñoz.

Por su parte, el alcalde subrogante de Coronel, Patricio Rojas, sostuvo que la recién creada Dirección de Medio Ambiente apunta, precisamente, a encarar estos hechos inaceptables.

“No pueden (las empresas) tener fallas de esta naturaleza. Se supone que hay procesos de mantención, procesos de revisión y la verdad es que el ruido, efectivamente, hacía pensar a los vecinos que podría haber habido alguna explosión”, dijo la autoridad comunal.

Además, detalló que los incidentes simultáneos, escapan “a lo que normalmente se produce con más frecuencia. Nosotros no queremos que se produzcan malos olores, ni tampoco hechos como el que se produjo en Enel, que generó un pánico entendible en la comunidad”.

El alcalde (s) de Coronel dijo desconocer cuántas personas concurrieron a centros asistenciales por las náuseas y dolor de cabeza, información que obtendría la Seremi de Salud mediante oficios internos.

Mientras, Enel Generación Chile explicó en un comunicado que “actuaron los sistemas de control de presión de vapor de agua en la central Bocamina I, lo que produjo la emanación de vapor y ruido por cerca de cinco minutos, sin revestir riesgo a la comunidad”.

El texto de la compañía considera “normal” el episodio, asegurando que se informó a las autoridades y a la comunidad como parte del protocolo de la compañía, descartando que el vapor de agua liberado sea el responsable del mal olor.