Una heroica situación se vivió la tarde de este jueves en Lebu, específicamente en sector de Curico -a 13 kilómetros de esta ciudad-, lugar donde un trabajador forestal salvó a un pequeño pudú de una jauría de perros.

Tras lo ocurrido, el animal fue llevado por el hombre al Instituto de Atención de la Diversidad (INAD), donde fue recibido por docentes del recinto.

Uno de ellos fue Daniel Baza, profesor de educación física, quien indicó que la llegada del pudú les generó “asombro, ternura y pena (a la vez) por estar huérfano”.

Tras su llegada, Baza manifestó que le entregaron todos los cuidados que estaban dentro de sus posibilidades, alimentándolo con hojas de maqui y chilco, además del agua correspondiente.

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Apenas se concretó la llegada del pudú al recinto educacional, se hizo la llamada respectiva al Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), cuyos funcionarios demoraron cerca de cinco horas en llegar al lugar, a pesar de tratarse de una especie en extinción.

BioBioChile llamó a dicho estamento, desde donde indicaron que cuentan con una oficina en Cañete, por lo que una de las posibilidades del retraso corresponde a que pudieron haber estado en otra actividad, o simplemente la distancia pudo ser un factor a considerar.

Tras el arribo del SAG al Instituto de Atención de la Diversidad, Daniel Baza indicó que el personal les indicó que el pudú está en buen estado.

Eso sí, añadieron que debido a la tensión podría sufrir -más adelante- un paro cardíaco, por lo que fue derivado a un centro de rehabilitación, donde se evaluará su estado para luego decidir si es dejado libre en la Cordillera de Nahuelbuta o enviado a la USS en Concepción para mayores cuidados.

Si bien la situación tuvo un final feliz en esta ocasión, la demora del SAG ha tenido diferentes consecuencias en otras ocasiones.

Ejemplo de aquello fue lo ocurrido a comienzos de octubre en Loncoche, cuando Carabineros alertó al SAG sobre un puma herido, llegando al día siguiente cuando el animal ya estaba muerto.

En 2017, los funcionarios simplemente no llegaron, en instantes en que un puma fue atropellado en el kilómetro 28 en la Autopista del Itata, siendo cuidado por una familia y permaneciendo en una caja de cartón.

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