Diversas reacciones han salido a la luz, luego que la Corte Suprema ordenara al Estado financiar el costoso medicamento de un niño de poco más de un año que padece atrofia muscular espinal.

Se trata del caso de Cristóbal, quien sufre de esta enfermedad degenerativa y cuyo tratamiento tiene un costo cercano a los 500 millones de pesos durante el primer año.

A la madre del niño, Daniela Díaz, se le negó el tratamiento en Fonasa y en el Servicio de Salud de Concepción, debido al alto costo, además, dicha patología no está incluida en la Ley Ricarte Soto.

Luego del fallo de la Corte Suprema, la madre de Cristóbal aseguró que esta decisión es una alegría para su familia y fue inesperada.

La presidenta de la Corporación Familias Atrofia Muscular Espinal Chile, Paulina González, sostuvo que la decisión de la Suprema es un gran paso. Sin embargo, cuestionó al Gobierno por no hacerse cargo de quienes padecen esta patología.

En octubre, la Cámara de Diputados aprobó por 127 votos a favor un proyecto de resolución donde solicitó al presidente Sebastián Piñera una política nacional para esta enfermedad, a través de un plan piloto con una glosa especial en el presupuesto del próximo año.

El diputado socialista, Manuel Monsalve, impulsor de la iniciativa, llamó al Gobierno a hacerse cargo. Mientras que el diputado de la UDI, Sergio Gahona, insistió en que debe primar el derecho a la vida.

Los parlamentarios esperan que se analice su incorporación a la Ley Ricarte Soto, considerando que en Chile son 170 los pacientes que padecen esta patología, de los cuales el 80% son niños y niñas.

El caso de Cristóbal es el tercero que se ha ganado en esta materia, mientras existen tres casos en proceso, en la Corte de Apelaciones de Concepción.