Los padres del niño que murió aplastado por un pesado portón metálico, en Concepción, presentaron una querella contra quienes resulten responsables por el mal estado de la estructura, por considerar el caso como una evidente negligencia.

El pasado 15 de septiembre, el pequeño Joaquín, de sólo seis años, acompañaba a sus padres que compraban en un local de cerámicos, ubicado en la esquina de calle Tucapel con Cruz, en la capital penquista.

Cuando los padres se retiraban del lugar, se sobresaltaron por el grito desgarrador del menor, que yacía debajo de un pesado portón metálico, el que lo aplastó y ocasionó heridas mortales en el cráneo.

La familia presentó una querella en el Tribunal de Garantía de Concepción, redactada por el abogado Marcelo Villena, quien indicó que el portón aludido pesaba unos 100 kilos y que la empresa debe responsabilizarse por dicho peligro.

La presentación del recurso legal busca también visibilizar el caso y evitar episodios similares, expuso el padre del menor, Fernando Campos, vecino de Dichato.

Campos agregó que la empresa expresó sus condolencias y que, si bien es una muestra de apoyo, no es suficiente.

Cabe mencionar que el mismo día de la tragedia, el local comercial “Bodegón de la Cerámica” estuvo sometido a peritajes por parte de Labocar de Carabineros.