En el Partido Regionalistas de los Independientes se manifestaron “molestos” y “tristes” luego que el presidente Sebastián Piñera retrocediera respecto a la designación del PRI Cristián Fuentes, como gobernador de la provincia de Bío Bío.

Lo anterior se suma a la serie de reacciones entre el conglomerado y la UDI que produjo el cambio de última hora.

A juicio del presidente del Partido Regionalista de los Independientes, Eduardo Salas, la líder del gremialismo, Jacqueline van Rysselberghe, habría inventado acusaciones con el fin de perjudicar a quien había sido designado el lunes pasado.

Una vez que fue nombrado Cristián Fuentes, al interior de Chile Vamos y principalmente desde la UDI comenzaron a presionar para que no asumiera, argumentando que por ejemplo habría apoyado a Alejandro Guillier y realizado campaña con dirigentes del PPD.

Lejos de entrar en la polémica, la ahora gobernadora de la provincia de Bío Bío, Teresa Browne, destacó a Fuentes y confesó que el sábado la llamó Andrés Chadwick para confirmarle su nominación.

Por otro lado, desde la UDI, su vicepresidente nacional, Jorge Fuentes, hasta ahora no se ha referido a las declaraciones del presidente del PRI y solo se limitó a respaldar la decisión de nominar a Teresa Browne.