A la falta de apoyo de las autoridades de la Seremi de Justicia y del propio Sename, atribuyen los educadores del Centro de Internación de Coronel la violencia que desde el año pasado se ha tomado el establecimiento. Infractores de ley se manifestaron el lunes, debiendo ser trasladados al hospital tres jóvenes que se autoinfierieron heridas con arma blanca.

Desde octubre pasado, cuando un intento de suicidio grupal obligó a la intervención del centro por orden de la directora nacional del Sename, Solange Huerta, los episodios de violencia y desorden han sido la tónica.

El hecho coincidió con la salida del director del Centro de Internación de Coronel, Pablo Muñoz, en una medida que hoy tiene al servicio con dos millonarias demandas laborales.

La última jornada de desorden fue este lunes, cuando un grupo de adolescentes se subió al techo de una de las casas del establecimiento, en manifestación por el allanamiento a cargo de Gendarmería, situación que los funcionarios del Sename atribuyen a la despreocupación de las autoridades, según expresó el dirigente Iván Arriagada.

Como muestra de esto último se evidencia la primera respuesta del seremi de Justicia, Jorge Cáceres, consultado por la grave situación, llamando a dirigir las preguntas al director subrogante del Sename.

Sólo al insistir en el rol que tienen las autoridades en el cuidado de los menores es que el seremi se refirió a lo ocurrido en el establecimiento para infractores de ley, pero deslizando la responsabilidad en la sociedad en su conjunto.

La semana pasada los funcionarios llamaron a las autoridades del Sename a pedir el traslado de los jóvenes infractores de ley mayores de edad y que cumplen condenas en el Centro de Internación, aunque esta vez los responsables de los hechos de violencia fueron menores aún en proceso de investigación.