Un nuevo retraso sufrirá el proyecto Puente Industrial del Gran Concepción al haberse aplazado hasta septiembre el trámite del Estudio de Impacto Ambiental. Fue la concesionaria la que pidió postergar el proceso, acogiendo el Servicio de Evaluación la solicitud.

Fue a través de una carta simple que la empresa que se adjudicó la obra vial pidió este plazo extra de ocho meses, argumentando la necesidad de más tiempo para recopilar información y desarrollar estudios necesarios que permitan responder adecuadamente las observaciones formuladas por la autoridad ambiental.

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El informe consolidado debía ser entregado este martes, pero ahora el Servicio de Evaluación Ambiental extendió hasta el 28 de septiembre el plazo para ingresar los antecedentes, los cuales son indispensables para los permisos ambientales que den la luz verde al inicio de la construcción del Puente Industrial.

El abogado Ignacio Sapiaín, de la Organización Ambiental Cumbres de Andalué, criticó la medida, denunciándola como irregular y que raya en la corrupción.

Y es que no es el primer revés que sufre el proyecto, sin que hasta ahora se determinen responsabilidades -recordó el dirigente vecinal- y menos se cobren multas estipuladas en el contrato de concesión.

Efectivamente, el primer gran retraso fue cuando el Servicio de Evaluación Ambiental rechazó la Declaración de Impacto, decretando la necesidad de un Estudio de Impacto, el que debía concluir a fines de este año para que a comienzos de 2019 partiera la construcción del puente, con una inversión de casi 200 millones de dólares.