La Superintendencia de Servicios Sanitarios comenzó una investigación sobre la emergencia en el suministro de agua potable turbia y con mal olor en Florida, proceso que comenzó el sábado con la toma de muestras, de manera de establecer lo que realmente ocurrió. Según el alcalde Jorge Roa hay indicios sobre la entrega de agua sin tratar y de allí la gravedad de lo ocurrido, dijo.
Fueron alrededor de 5 mil personas las que se vieron afectadas por el irregular suministro denunciado la noche del viernes, y que se extendió hasta el sábado e incluso parte del domingo, cuando hogares aún daban cuenta de problemas en la calidad del agua.
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Según el alcalde de Florida, Jorge Roa, se trató de una grave emergencia, cuyo origen habría estado en el intento de Essbio por remediar una baja de presión que llevó a la sanitaria a inyectar al sistema agua sin un tratamiento previo.
Ante el riesgo en que esta situación puso a los vecinos de su comuna, el alcalde presentó una denuncia en la Superintendencia de Servicios Sanitarios, confirmando que analizan otras acciones como una demanda colectiva contra Essbio para que se reparen los daños causados.
No obstante la solicitud de investigación, la Superintendencia ya inició el proceso de rigor, puntualizando el jefe zonal de la repartición Rodrigo Riquelme que por ello se tomaron muestras del agua entregada a los hogares y que una vez recopilados todos los antecedentes se procedería a evaluar una posible sanción a la sanitaria.
La multa máxima que enfrenta Essbio podría superar los 500 millones de pesos, aunque ello va a depender de los antecedentes que se alleguen al proceso sancionatorio y los descargos que pueda realizar la empresa.
Si bien hay antecedentes de casos de gastroentiritis denunciadas al Hospital de Florida, el alcalde Roa dijo que solicitarían un informe al establecimiento asistencial para que se confirme si la docena de afectados sería por causa del consumo del agua potable.
