La Compañía General de Electricidad (CGE) trabaja en la poda y tala de vegetación y árboles alrededor del tendido eléctrico como una medida de precaución para evitar incendios forestales.

Sólo en la región del Bío Bío se despejarán 200 kilómetros de bosque, en un contexto actual donde la normativa permite que actualmente coexista la vegetación con el alumbrado público.

Sin embargo, la CGE decidió ir más allá, por lo que efectúa un trabajo de despeje total alrededor de los postes y los cables.

Fue el trabajo que inspeccionaron en terreno y que da cuenta de que en la zona son 200 kilómetros en 45 mil postes con el trabajo de 37 brigadas especializadas en estas faenas.

El presidente del Grupo CGE, Antonio Gallart, explicó que las obras contemplan una franja de servidumbre que consiste en un área de 5 metros alrededor de las líneas, donde se talan los árboles.

El costo de la tala y poda es de $15 mil millones, según la CGE, lo que en todo caso es un ahorro en prevención para la gobernadora de Concepción, Andrea Muñoz, dadas las cuantiosas pérdidas que dejan los siniestros forestales.

La seremi de Energía, Carola Venegas, reflexionó sobre la falta de suministro que ocurre cuando hay emergencia, asegurando que la fiscalización a las empresas eléctricas existe en lo que se les obliga, aunque destacó la interpretación más rigurosa de la CGE en esta materia.

Todos los consultados coincidieron en que debe ser un trabajo que se extienda a otras empresas eléctricas y contar con la colaboración de las forestales y dueños de predios.

Franja que ha sido despejada con una máquina taladora en sectores como Ríos de Chile.

Ya se han talado más de 500 árboles aledaños a las líneas y a la fecha se han alcanzado 25 kilómetros, un 12% del total.

No obstante, se pretende tener un avance significativo para el verano a fin de evitar tanto la generación de incendios como el corte de suministro.

Cristian Valdebenito (RBB)
Cristian Valdebenito (RBB)