La fiscal Ana María Aldana, que investiga la contaminación en Coronel y en la que se formalizó a ingenieros de Enel, señaló ante la Corte de Apelaciones de Concepción que la propagación de metales pesados sigue desde el vertedero de cenizas de la termoeléctrica Bocamina.
Fue en el marco de los alegatos por la ampliación de las medidas cautelares contra los ingenieros imputados Aldana fue consultada si se mantenía la emisión de agentes contaminantes al medio ambiente en esa comuna.
La respuesta de la persecutora a la pregunta del ministro Renato Campos fue categórica. Si bien -dijo- Enel paralizó la propagación de metales pesados desde la chimenea de la central Bocamina, se mantenía esta situación respecto del vertedero de cenizas de la termoeléctrica.
Y lo anterior fue reafirmado por la fiscal Aldana a Radio Bío Bío al concluir la audiencia, adelantando que hay diligencias pendientes respecto de los efectos que tiene el acopio de cenizas.
Consultada por si la contaminación que las cenizas están generando es en las napas subterráneas, la fiscal expresó que esa es la sospecha, pero aseguró que esas aguas van al mar y no son usadas para el consumo humano.
Este nuevo antecedente sobre la investigación contra Enel y los ejecutivos formalizados -Mario Enero, David Poblete y Pablo Arnes- se entregó en el marco de la presentación de un querellante pidiendo sumar a la firma quincenal contra los imputados la medida cautelar de arraigo nacional, lo que fue desechado por la Tercera Sala de la Corte de Apelaciones.
La resolución fue cuestionada por la abogada Angela Contreras, al sostener que con lo señalado por la Fiscalía se reforzaba el aumento de las cautelares.
Sobre la contaminación desde el vertedero, el abogado de Enel, Daniel Praetorius, no quiso referirse, subrayando fuera de micrófono que eso no fue lo que la fiscal Aldana había informado durante la formalización la semana pasada.
